Los Salmos 42-49 abren el segundo (Salmos 42-72) de los cinco libros de los Salmos. Parece que no se sabe por cierto cuando o por quién muchos de ellos fueron escritos.
Aparentemente fueron cantado por aquellos conocidos como los descendientes de Coré. El mismo Coré que se rebeló contra el Señor, conspirando contra sus lideres, y que fui castigado por Dios (Números 26:9-11). Pero sus hijos no tomaron parte en la rebelión de su padre, y sus descendientes oran a Dios cantando unos de los Salmos 42-49.
Los Salmos 42-45 muestran una lucha de creyentes que tienen dificultad en reconciliarse con la situación mala que le rodean y la intervención pasada de Dios con su pueblo. El salmista ora a Dios, pero también pregunta a Dios por que son así las condiciones suyas.
La serie de Salmos 42-45 se acaba sobre el triunfo del Rey de justicia y de verdad que le pondrá todo en orden al final del cuenta y del tiempo — Salmo 45 siendo citado en Hebreo 1 y aplicado a Cristo, nuestra justicia.
Oramos al Padre nuestro, con aquellas citaciones de los Salmos 46-49 :
- « Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza; siempre está dispuesto a ayudar en tiempos de dificultad. Por lo tanto, no temeremos cuando vengan terremotos y las montañas se derrumben en el mar » (Salmo 46:1-2, Nueva Traducción Viviente).
« El Señor de los Ejércitos Celestiales está entre nosotros; el Dios de Israel es nuestra fortaleza » (Salmo 46:7, NTV).
« ¡Quédense quietos y sepan que yo soy Dios! Toda nación me honrará. Seré honrado en el mundo entero » (Salmo 46:10, NTV).
« El Señor de los Ejércitos Celestiales está entre nosotros; el Dios de Israel es nuestra fortaleza » (Salmo 46:11, NTV).
« Canten alabanzas a Dios, canten alabanzas; ¡Canten alabanzas a nuestro Rey, canten alabanzas! » (Salmo 47:6, NTV).
« Oh Dios, meditamos en tu amor inagotable mientras adoramos en tu templo. Como lo merece tu nombre, oh Dios, serás alabado hasta los extremos de la tierra; tu fuerte mano derecha está llena de victoria. Que se goce la gente del monte Sión; que se alegren todas las ciudades de Judá a causa de tu justicia » (Salmo 48:9-11, NTV).
« Pues así es Dios. Él es nuestro Dios por siempre y para siempre, y nos guiará hasta el día de nuestra muerte » (Salmo 48:14, NTV).
« ¿Por qué tendría que temer cuando vienen dificultades, cuando los enemigos me rodean? […] Los sabios finalmente tendrán que morir, al igual que los necios y los insensatos, y dejarán toda su riqueza atrás. […] Ese es el destino de los necios, aunque sean recordados como si hubieran sido sabios » (Salmo 49:5, 10, 13, NVI).
¿Por qué no compartir con nosotros algunos de las oraciones suyas basadas sobre citaciones de los Salmos 42-49?
Fuente: Venir a la Biblia para encontrar a Dios de la sección Saber del sitio Savoir et croire. ca (saber y creer).